Núm. 2 (2019): Ihering. Cuadernos de Ciencias Jurídicas y Sociales.

Ihering. Cuadernos de Ciencias Jurídicas y Sociales ha regresado. Hace apenas tres años, Carlos Franz dedicó el que hasta ahora es, seguramente, su mejor libro, a la relación entre Johann Moritz Rugendas, Charles Darwin y Carmen Arriagada en el Chile recién independizado. La obra se publicó bajo el titulo Si te vieras con mis ojos. En el final de la obra Rugendas y Darwin, que mantienen un último encuentro en la novela, han regresado a Europa tras su aventura americana, pero la impronta de un mundo más nuevo determinará siempre su identi- dad y su óptica creativa o científica. El otoño europeo se convierte en la primavera austral. Pero, de vuelta en su Augsburgo natal, Rugendas descubre que todo regreso sirve únicamente para comprobar el olvido. Para constatar que, como Ulises, quien regresa lo hace para comprobar que no es más que un desconocido que se interna en un hogar ya ocupado por otros.

Rugendas se angustiaba porque, habiendo consagrado su vida al arte y al amor (“sólo crea quien ama” piensa el Rugendas de Carlos Franz), había también descubierto que la belleza le causaba dolor, y no se sentía capaz de pintar lo más hermoso. Tendría que llegar Evelyn Waugh para afirmar, en Noventa y dos días, que pasada la primera juventud la lectura y la creación no debían obedecer a más impulso que el mero placer. Y que únicamente ese impulso generoso y honesto permitía transitar del solaz a la responsabilidad y al deber. En este otoño del siglo, nuevo otoño del proyecto de civilización humana, Ihering. Cuadernos de Ciencias Jurídicas y Sociales, regresa al hogar en el que ha permanecido desde su fundación: el hogar de la creación y la investigación, del compromiso científico y cívico. Rugendas atónito, fascinado y feliz ante la luminosa Bahía de Valparaíso. Sabiendo que su hogar es, precisamente, el viaje.